En el panteón naval español, junto a muchos otros grandes marinos, brilla con lustre sin mácula el nombre del Contralmirante Casto Méndez Núñez, cuyos apellidos seguro que suenan a nuestra audiencia, pues son muchas las ciudades y pueblos en España en las que hay una calle, plaza o jardín, dedicada a su figura. Sin embargo, si preguntásemos a los transeúntes, e incluso a los vecinos de esa calle, sobre las hazañas que se homenajean y el hombre que da nombre a esa vía, muy pocos sabrían decirnos nada de él. Tal es el nivel de desmemoria de un pueblo a quien entre unos y otros han robado su historia. Pero como nosotros somos de quienes gusta nadar contra la corriente, pondremos nuestro granito de arena en la recuperación de esa memoria histórica, la de verdad, forjada por hombres que jamás se doblegaron ante la mediocridad.
