El 30 de julio de 1975, Jimmy Hoffa fue visto por última vez a la salida de un restaurante en Detroit, EE.UU.
Después fue reportado como desaparecido. Y a partir de ese momento se convirtió en uno de los mayores misterios en la historia de la investigación criminal estadounidense: su cuerpo nunca fue hallado.
Hoffa, quien se había transformado en una de las figuras más polémicas de Estados Unidos como presidente del Sindicato de Camioneros -una organización conocida como los Teamsters-, era visto como un héroe por sus compañeros.
Pero a la vez, durante su vida, había cosechado una larga lista de enemigos.
Y esa es una de las principales tramas que se desarrollan en «El irlandés» («The Irishman»), la última película que dirigió Martin Scorsese y que es interpretada por Robert De Niro y Al Pacino.