El grupo de Biología Molecular y Fisiología Vegetal del Instituto Botánico de la Universidad de Castilla-La Mancha (UCLM), junto a investigadores del Instituto de Biología Molecular y Celular de Plantas (IBMCP)-CSIC han publicado un trabajo en el que se detalla cómo se han creado tomates con genes de azafrán.
La nueva planta, a la que los investigadores han denominado ‘Tomafrán’, muestra una elevada capacidad antioxidante.
El fruto del tomate fue elegido por el grupo de investigadores como un producto “ampliamente cultivado que puede usarse para aumentar la producción y ofrecer potencialmente una fuente natural estandarizada y controlada de crocinas y picrocrocina para su uso farmacológico”, tal y como indican.