Casa Farfara es un proyecto de agricultura emocional que ponemos en valor los pilares básicos dónde se sostiene la agroecología: el mejoramiento de la calidad del suelo, incluyendo la diversidad de organismos que viven en él, y el manejo del hábitat mediante la diversificación temporal y espacial de la vegetación, que fomenta la biodiversidad, especialmente la de los insectos beneficiosos.
Las semillas como principio de la vida es nuestro primer objetivo. Empezamos a buscar semillas naturales libres y arraigadas en el territorio. Tarea complicada y difícil teniendo en cuenta que más del setenta por ciento de las semillas del mundo están en manos de cuatro multinacionales. Nosotras a día de hoy contamos con más de sesenta especies y unas trescientas variedades, “auténtica libertad”.