Hablar con nuestro adolescente supone, en no pocas ocasiones, todo un reto, ya
que están en una etapa vital y del desarrollo donde exploran todos los límites de
su alrededor, ya sean sociales o conductuales. Además, debido al cóctel de
hormonas propio de la pubertad, puede haber cambios de humor que pueden ser
percibidos como bruscos que afecten a la convivencia familiar. Por eso, desde
Terapitea animamos a que haya una buena comunicación en el hogar.
Este tema bien puede dar para unas cuantas horas, incluso días, pero hoy vamos a
centrarnos en algo que parece obvio, pero no lo es: la base de la buena
comunicación es el diálogo. Esta frase, que la hemos escuchado hasta la
saciedad, es totalmente cierta, pero a veces no tenemos muy claro que es el
diálogo y lo confundimos con dar información.
