El Día Europeo para el Uso Prudente de los Antibióticos se celebra cada 18 de noviembre para concienciar sobre la resistencia a los antibióticos y promover su uso responsable. Su objetivo es evitar el abuso de estos fármacos, ya que su uso inadecuado puede hacer que las bacterias se vuelvan resistentes, reduciendo su efectividad frente a las infecciones.





































